jueves, 1 de octubre de 2009

KHALA. EL HADA BLANCA (PARTE I)

Hola! hoy cuelgo en el blog la primera parte de que escribí: "Khala. El hada blanca", os recuerdo que podéis leer su continuación en entradas antiguas de este mismo blog. El relato ha sido ilustrado con fotografías de Alassïe (http://www.costureroreal.com/), ella misma ha diseñado los trajes, ha realizado el maquillaje, efectos, ambientación...
KHALA. EL HADA BLANCA

PARTE I: LA FORTALEZA
Fueron tres los sucesores nombrados por los altos elfos en el Reino Dranyn; tres hermanos herederos de todos sus bienes y tierras: Darweïn, Alenür y Ahörin. A cada uno de ellos se le entregó una corona élfica y una ashkara o piedra mágica de poder.
Darweïn obtuvo la ashkara roja, que poseía el poder del fuego. Si era lanzada sobre algo lo abrasaría al instante.

La ashkara azul fue entregada a Alenür. Esta tenía el poder del agua. Si era lanzada se transformaba en lluvia e inundaba el lugar donde hubiese caído. Podía provocar la peor de las inundaciones.
La piedra de color verde fue entregada a Ahörin, que, en el momento de la entrega, la tomó entre sus manos con sumo cuidado, pues la ashkara verde tenía en poder de los elementos de la naturaleza, y si caía al suelo despertaría a los árboles, flores, animales y espíritus de los bosques, que acudirían al lugar donde había caído.



Cuenta una leyenda del Reino de los Dranyns o altos elfos que, aquel que estuviera en posesión de las tres piedras sería capaz de dominar el mundo, pero tan solo podía hacerlo un ser de corazón puro como era un hada blanca.

Las hadas blancas, que se caracterizaban por el color de nieve de su cabello eran muy difíciles de encontrar en la naturaleza. Solo nacía una cada millar de años en un lugar especial: un nido de águila, en el interior del tronco de un árbol...


El tiempo pasó y cada uno de los elfos aprendió a gobernar sus tierras con maestría hasta que llegó la Era Oscura. Entonces el Reino Dranyn desapareció. La noche cayó eternamente sobre el día y el mundo calló. Los Dioses Muruks se hicieron con el poder sobre los altos elfos, que eran ya muy ancianos, y haciendo uso de la magia negra les arrebataron a Darweïn y a Alenür la piedra roja y la azul. El Reino de los Dranyns había sido devastado, y solo Ahörin, el menor de los tres hermanos había logrado escapar con vida de los Muruks, llevándose la ashkara verde con él.
Ahörin, que temía por su vida, se dirigió al bosque más cercano al que fue su reino e invocó en la noche a las hadas del bosque. Levantó la piedra verde y pronunció extrañas oraciones en lenguaje élfico. A continuación apareció ante él con magnificencia la Reina Maab, madre de todas las hadas y líder de la Fortaleza Blanca, morada de las hadas de los bosques.

La Reina que era un hada blanca portaba un largo vestido y larga melena de nieve. Sobre su lacio pelo, adornado por varias trenzas lucía una corona élfica adornada con entrelazos. Un aura mágica rodeaba su figura e iluminaba el bosque.


El elfo explicó lo sucedido a la Reina Maab y le entregó la ashkara verde, ella prometió ocultarla en un lugar donde nadie pudiera encontrarla.

Una noche, Maab despertó a la única hada blanca que a aparte de ella moraba en la Fortaleza: Khala, y, cubriendo su cuerpo y cabello con un manto se dirigieron a un embarcadero próximo a la Fortaleza Blanca. En él había varios botes de madera y tomaron uno, adornado con relieves entrelazados en madera. Ambas llevaron la piedra verde a la “Isla de Taurün”, la isla maldita, donde nadie osaba entrar, ya que en ella habitaban los espíritus de los muertos. Atracaron el bote y cavaron un agujero en la arena, allí enterraron la piedra verde, después regresaron al bote y a la Fortaleza Blanca. Nada les sucedió y nada contaron sobre lo sucedido al resto de hadas.

Al cabo de unos días los Muruk, que registraban todos los poblados buscando la piedra, encontraron al elfo mientras dormía en el bosque y cercenaron su cabeza. Una vez muerto buscaron en sus ropas y en su zurrón pero no encontraron la piedra verde. Al día siguiente cuando la noche llegó asaltaron la Fortaleza Blanca. Muchas de las hadas fueron asesinadas con crueldad, otras empaladas. La Reina Maab había logrado escapar en un bote junto a algunas de sus hijas pero el Hada Blanca fue capturada.

5 comentarios:

  1. es precioso el relato cris! y tan inspirador.. ojala hubiese tenido mas medios para recrear de verdad la maravilla de tu relato, porque es tremendamente bonito

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  2. Preciosas han quedado las fotos! has hecho un trabajo genial. Creo que es un poco corto el relato pero bueno. Ahora a ponerse con la tercera parte y final. Un besín

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  3. Te ha quedado todo hermoso, tanto en relato como las fotografías.
    Un gran trabajo

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  4. Hola Sakura, muchas gracias y bienvenida al blog:). Voy a pasar por el tuyo

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  5. Hola Cris!!!
    Antes de nada, siento haber tardado en leer este relato, que tenía pendiente... en realidad tenía tu blog un poco abandonado, y lo siento.
    Pero ya estoy aquí, poniéndome al día!!

    me ha gustado mucho este relato.
    Bueno, me da la impresión de que toda la narración podría detallarse más, pero a mi parecer esto no es una mala crítica en sí, sino una forma de contarlo, de tratar de contar mucho en poco tiempo.

    Como preludio al relato del hada blanca está genial, además, pues nos explica algunos por-qués.

    Parece que tu mundo particular comienza a tomar forma, hablas de seres, personajes, objetos trascendetales, y lo hilas todo muy bien.
    Enhorabuena!!
    Sigue así, poco a poco crearás un gran mundo fantástico con vida propia!!

    1bsito fuerte
    Tu amigo Darka.


    PS: Ya me llegaron los cuentos!!! En ppio pedí 1 de cada, para ver si estaban bien, o si cambiar algo, pero ahora pediré más de cada uno, va?? inlcuyo los tuyos!!
    joe, y molan mucho!!
    bsito!

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